Los Ferrari 308GTB del grupo 4, que participaron en el Rally 4 Regioni de 1981, fueron desarrollados por la empresa Finlandesa MAT (Mikela Auto Tuning) en 1977 y preparados por el italiano Giuliano Michelotto yconsiguiendo terminar líderes al final de la carrera.
Un rally que se corría entre asfalto y tierra guardaba una sorpresa en su última especial. Se partía de Cecima girando tres veces y media por las típicas carreteras más allá del Valle del Po, adentrándose en la zona de Alessandria.
Tony Fassina y “Rudy” partían como uno de los favoritos al triunfo final gracias a las prestaciones que prometía el Opel Ascona del equipo Conrero que conducían. En otro de los Ascona unos jóvenes Miki Biasion y Tiziano Siviero tenían también grandes opciones para optar a la victoria. El tercer Ascona era el pilotado por un experto Maurizio Verini junto a su compañero Mario Amati.
Entre los Fiat 131 Abarth, el vencedor del año anterior, Bernard Beguin y Jean-Jacques Lenne, presentaban su candidatura, acompañados en otro de sus coches por Dario Cerrato y Luciano Guizzardi Y en los Ferrari 308GTB los franceses Jean Claude Andruet y Denise Emanuelli participaban con el dorsal 6 y Mauro Pregliasco y su tocayo Mauro Mannini en el Olio Fiat con el dorsal número 3. Sin olvidar, por supuesto al Lancia Stratos «Grifone» conducido por Fabrizio Tabaton y Marco Genovese.
Se da la salida y rápidamente Pregliasco pone al primero de los Ferrari 308GTB en primera posición. En Castellaro aumenta su ventaja, mientras Andruet, que le cuesta coger el ritmo al rally consigue el mejor tiempo en el tramo 4 aupándose al segundo lugar de la clasificación.
En el primer paso por Ottone comienza la fiesta. Los Caravinieri detienen el Ferrari de Andruet acusándole de hacer maniobras peligrosas cuando trataba de calentar neumáticos, aun así, vence en el tramo de Ottone. En Monte Penna, el Ascona de “Lucky” y Fabio Penariol consigue el mejor tiempo y se coloca en cabeza de carrera por delante de los de Ferrari, que sufren varios problemas. El de Opel sigue tirando y en Santo Stefano d’Aveto también marca el mejor tiempo ampliando su ventaja.
Después de las dos pruebas de la región de Liguria, la prueba vuelve a la Emilia Romagna donde Tabaton, en un alarde de pilotaje, consigue la victoria. De allí pasamos a Lombardía y en Rocca Susella Lucky vuelve a dominar. Antes de comenzar la segunda vuelta, Verini y Tabaton retiran sus coches y se llega a la asistencia. Los hombres de Ferrari se ponen las pilas y desde ese momento comienzan la remontada.
Una nueva pasada por Monte Penna obliga a Lucky a detener definitivamente su coche. «Tony» Fassina comanda ahora la carrera con Pregliasco a 40 segundos. Este empieza a remontar y termina la etapa a 22 segundos. Ya solo quedan en carrera 38 coches de los 92 que partieron al inicio.
Pero no podía ser una carrera completa sin una buena intervención divina. La segunda etapa empieza con una lluvia torrencial envuelta en granizo. Al partir de Poggio Ferrato, en Val di Nizza Andruet cree que lo que cae del cielo es nieve y monta neumáticos equivocados, aunque esto lo le impide dominar los tramos. Pregliasco culmina la remontada y adelanta al Ascona de Tony Fassina cuando este pincha y pierde medio minuto.
Mientras, Andruet ya supera a Biasion y se pega al Ascona de Tony Fassina hasta la etapa de Pometo, donde adelanta al italiano y se coloca segundo. El francés de Ferrari consigue el mejor tiempo en Fortunago y en Rocca Susella, llega a 52 segundos de su compañero de equipo Pregliasco a falta de una prueba: el Circuito di Cecima.
Las tres vueltas y media que se dan al circuito parten de Cecima en dirección Busanca, se baja a Frascata y luego se sube a la Serra del Monte, volviendo desde allí nuevamente a Cecima. Tras la primera vuelta, Andruet recupera 20 segundos, la distancia a la que queda tras completar la segunda vuelta. Desatado, el francés supera al Ascona de Biasion, que se hace a un lado para dejarle pasar y termina la tercera vuelta liderando la prueba, ayudado por un trompo de Pregliasco, quien no supo administrar su ventaja y aguantar la presión. Al final de la Prueba, Andruet y Emanuelli consiguieron la victoria por delante de Pregliasco y Mannini con 5 segundos de ventaja. Terceros fueron los pilotos del Opel Ascona 400 Tony Fassina y Rudy y detrás de ellos, otro de los Ascona con Miki Biasion y Tiziano Siviero al volante.
Ferrari 308GTB Grupo 4 Superslot
Hace tiempo (2009) que Superslot nos regaló su versión del Ferrari 308GTB de rally (39€ eran los culpables) y dentro de las versiones que los diferentes fabricantes nos han brindado, creo que la del fabricante británico es la mejor resuelta.
Y no porque su parecido con la versión real sea un elemento a destacar, sigue dentro de los mismos errores que otros repiten, pero de manera más sutil. Es el cuidado por los detalles lo que marca la diferencia con las otras versiones. Así, podemos comprobar que el coche guarda unas cotas más similares con su hermano mayor, igualmente, la línea está más conseguida en esta versión, sin embargo, la decoración elegida por Superslot no es la más fácil de implementar.
Y es porque ese color amarillo desmerece el esfuerzo en algunos lugares, como en el frontal, donde los faros de serie tienen ese aspecto «juguete» del cual, los amantes al automovilismo a escala huimos. Es cierto, el frontal no está verdaderamente bien conseguido, aunque la calandra nos lleve a pensar lo contrario.
Sin embargo, echar la mirada hacia atrás, nos lleva a una zaga con grandes virtudes. Buenos acabados marcan la línea de los faros, aunque se echa en falta el Logo del Caballino Rampante entre el faro y el logo de Olio Fiat. Y con grandes dudas en el color del paragolpes, no consigo ver si el verdadero era blanco prístino o amarillo chillón, aunque me inclino por el blanco.
Las llantas, en color bronce tienen una buena terminación. No marcarán un antes ni un después en la marca, pero le quedan algo más que curiosas.
Un detalle que no quiero dejar pasar por alto es el trabajo asombrosamente realizado en la antena superior en goma, cuyo cromado le da un toque de realismo al coche y nos saca de la rutina del negro marengo al que estamos más que acostumbrados
El interior no destaca por ser un techado de virtudes, pero es cierto que tampoco es espartano en exceso. Troquelado con alegría, le falta el toque barroco para que nos llame la atención, aunque mantiene el estándar de muchas de las marcas.
Dinámicamente no parece muy prometedor, a pesar de su Mabuchi de 18.000 rpm en posición transversal sobre el eje trasero, pero existen chasis fabricados en 3D que pueden irle muy bien. Es un coche precioso que su presencia en pista puede lucir como pocos. Luego irá más o menos deprisa, pero miradas seguro que se lleva unas cuantas…
Última Vuelta.
Otra pequeña joya de Superslot que pasó más o menos desapercibida entre la multitud de novedades que aparecían en su época, pero que muchos de los aficionados no dejaron escapar. Y la verdad es que no me extraña. El coche es una auténtica delicia. No se oferta a la locura de precios por los que se mueve el VW Polo del mismo fabricante, pero tampoco es barato.
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